Se trata de un caso único en el fútbol español y casi diríamos a nivel internacional: Joan Bernat es ¡la primera barbería instalada en el interior de un vestuario de Primera División!, concretamente en el del RCD Mallorca, en el estadio de Son Moix de la capital insular.
Con el apoyo y de la mano de American Crew y Revlon Professional, Juan José Bernat de la barbería Joan Bernat de Mallorca ha conseguido lo soñado por muchos: instalar una barbería dentro del vestuario de un equipo de Primera División (ver vídeo abajo).
La barbería Joan Bernat es un centro de referencia en Mallorca, dando al hombre de hoy ese aire innovador con la esencia de la barbería clásica, y ofreciendo al cliente la sensación de que se sienta como en casa. “No solo son clientes, forman parte de nuestra gran familia,” dice Juan José Bernat.
Un día cualquiera en el año 2015, un jugador del RCD Mallorca, Lucas Aveldaño, fue el primero del equipo en acudir a Joan Bernat. A Lucas le siguieron más después y finalmente, ante la acuciante necesidade del futbolista moderno por el cuidado de su imagen personal, surgió la oportunidad de instalar una extensión de la barbería en las mismas entrañas del estadio de Son Moix en Palma de Mallorca. “Mantenemos una extrecha relación con el RCD Mallorca que esperemos se mantenga durante años,” explica Juan José.
Actualmente, el equipo de Joan Bernat lo integran cinco profesionales, quienes siguen trabajando con la ilusión del primer día. La marca empezó a andar en el año 1967 en un humilde barrio palmesano, de la mano de Joan Bernat, padre y maestro de Juan José. Después de trabajar como empleado en una de las mejores peluquerías (barberías) de la época de los años sesenta, y gracias a la ayuda de un buen cliente, Pedro Calderón, tiene la fuerza económica para poner en funcionamiento su propio proyecto.
Juan José Bernat vivió el oficio desde la cuna, el buen trato al cliente y el saber hacer en cualquier detalle de las técnicas de la barbería clásica. A finales de los 80, principio de los 90 el negocio pasó una época complicada, la erupción de los salones unisex junto a los problemas de salud de Joan Bernat padre llevaron a Juan José a ponerse al frente del negocio.
“Al finalizar el servicio militar la ilusión de mi padre era que montara mi propio negocio en el centro de Palma, ya que en sus principios como trabajador de una barbería en el centro de dicha ciudad, recordaba una clientela exclusiva y facilidad para captar nuevos clientes,” explica Juan José. “Yo, en cambio, decido quedarme junto a él y seguir aprendiendo del mejor.“
“Pasados unos años desde mi decisión de quedarme con mi padre y no empezar una nueva etapa en el centro de Palma, mi padre me recuerda que él me aconsejó dejar la barriada pero que yo no quise y que quizás me estaba arrepintiendo, pero le contesté que algún día tendría clientes de toda la isla y que hasta los jugadores del RCD Mallorca vendrían hasta aquí por mis servicios,” recuerda con emoción Juan José Bernat.
La barbería fue creciendo año tras año pero los problemas de salud de Joan Bernat padre dificultaban que pudiera continuar con la profesión que tanto le dio y amaba. Tras varios años de lucha, en el año 2005 falleció. “Me quedé sólo y sin el pilar de mi vida, pero siempre recuerdo sus consejos tanto para la vida como para mi profesión,” afirma Juan José.
Y añade: “Tras años de búsqueda de productos exclusivos en caballeros y para nuestros servicios, encontramos a American Crew de Revlon, por fin. La imagen, el concepto de empresa, todo impresionante para mí. Comenzamos a trabajar juntos, empezamos a recibir formaciones, charlas con grandes profesionales, aire fresco para nuestro mundo que volvía a resurgir después de años.“
Juan José Bernat sumó lo aprendido de la barbería clásica con los nuevos conceptos de la barbería masculina y todo empezó a mejorar como él soñaba. Intentó formar un equipo de trabajo pero los primeros pasos no dan el fruto deseado. Sin embargo, con el paso de los años coge fuerza y decide contratar a peluqueros sin formación en el sector masculino, aunque con muchas ganas de aprender. “Decido enseñarles tal y como mi padre me enseñó a mi, amando lo que hacen. Ahora sí, empiezo a tener equipo y una gran familia, todos con el mismo fín, hacer de nuestra profesión una forma de vida,” concluye Juan José.
Después de toda una vida de profesión, el poder ofrecer sus servicios de barbería a los jugadores de un equipo de Primera División dentro de su propio estadio es el final feliz a una historia de lucha y superación personal. “Me tiemblan las piernas, viene a mi cabeza el recuerdo de aquella conversación con mi padre –’algún día vendrán los jugadores del R.C.D. Mallorca hasta aquí’–… y sí, así ha sido finalmente,” relata Juan José.