La calvicie es un problema atemporal que afecta tanto a mujeres como a hombres. Carlos Crespo, de Centro Med –clínica especializada en trasplante capilar en Bilbao y Barcelona–, no habla sobre dos de las técnicas más utilizadas.
El trasplante capilar es una solución eficaz y duradera para acabar con la calvicie o, al menos, camuflarla. Se trata de una cuestión que preocupa a muchas personas, especialmente a hombres de entre 40 y 55 años, aunque cada vez hay más casos de mujeres que demandan un trasplante capilar. Quienes se decantan por esta opción buscan “la garantía de un resultado natural y, con el avance de la investigación actual, es muy posible acercarse a este objetivo”, explica Carlos Crespo, quien añade: “Es importante hacer una elección correcta de la clínica, el médico y, sobre todo, el método utilizado”.
A este respecto, señala que los métodos FUE y DHI son los más famosos y utilizados en sus centros.
Método FUE
El método FUE (Extracción de Unidades Foliculares) es una técnica compleja que requiere una gran experiencia. Consiste en tomar los bulbos capilares del área donante, uno a uno, y replantarlos luego, y siempre uno a uno, en la zona receptora con baja o nula densidad capilar. En una sesión se extraen entre 1.000 y 1.500 unidades del área donante que, por lo general, está en la parte posterior de la cabeza.
Este tipo de trasplante se compone de cinco etapas. Primero se hace un diagnóstico de la zona donante, antes de la administración de la anestesia local, y se rapa la cabeza (no es posible quitar un folículo si el cabello tiene más de 1 mm de largo). Después se extraen los bulbos foliculares con un extractor FUE automatizado. Para asegurar una mejor viabilidad de los trasplantes, se mantienen en un ambiente frío y húmedo (2 a 4 grados centígrados) durante 6 horas. A continuación, el cirujano realiza el nuevo diseño capilar con microincisiones en el área de implante. Por último, se inserta cada folículo piloso en cada incisión.
Los resultados podrán apreciarse 7 u 8 meses después, si bien habrá que esperar entre 12 y 18 meses para ver un resultado completo con el engrosamiento del cabello.
Método DHI
La particularidad del método DHI es el uso de una pluma especial llamada DHI Implanter o CHOI Pen. Esta pluma de implantación proporciona una mejor precisión y una buena dirección del folículo implantado.
Otra diferencia con el método anterior es que, en el método DHI los implantes se trasplantan directamente al área receptora, es decir, no necesitan pasar primero por un almacenamiento en frío. Suele utilizarse el propio cabello del paciente de la parte posterior de la cabeza. Sin embargo, en algunos casos es posible que el área donante no tenga suficiente cobertura de cabello, por lo que es posible utilizar otras partes vellosas del cuerpo para suministrar los bulbos foliculares.
El método DHI es bastante laborioso, ya que dura entre 4 y 7 horas, pero promete un resultado satisfactorio. Como ventaja, esta técnica ofrece una mayor densidad de cabello: de 80 a 90 injertos por cm2, mientras que en el método FUE es de 45 a 60 injertos por cm2. Además, las cicatrices son mínimas y no hay sangrado, por lo que la recuperación postoperatoria también es más rápida. Asimismo, no requiere que el paciente se rape la cabeza.
Sin embargo, el límite de este método está en el número de injertos implantados en una sesión, que es solo 2.000. Por el contrario, en el método FUE se pueden realizar hasta 5.000 injertos. Esto significa que aquellas personas que escojan el método DHI y que necesiten más de 2.000 injertos, deberán realizar una segunda sesión.
“Cada técnica de injerto tiene sus propias especificidades, ventajas y desventajas. La elección dependerá tanto del paciente como de las recomendaciones médicas”, explica Carlos Crespo.