Su nombre es Christian McPhilamy, tiene 8 años y decidió dejarse crecer el pelo para poder donarlo a los niños que lo han perdido a causa de una enfermedad.
Los héroes no tienen edad. Y Christian McPhilamy demostró que él tenía madera para convertirse en un de ellos. Él tiene 8 años, vive en Florida y consiguió cumplir un objetivo que era tremendamente importante para él. Dos años antes, después de ver un anuncio en la televisión del St. Jude Children’s Research Hospital, que le impactó profundamente, decidió dejar crecer su cabello para poder donarlo a Children With Hair Loss, una asociación americana que ayuda a los niños que sufren de tumores, leucemia y cáncer.
Ésta fue una decisión que le iba a conllevar algunos retos, no sólo tener que cuidar su cabello largo, sino también ser valiente para enfrentar a sus amigos e, incluso, a los padres de sus compañeros de clase. Pero él fue fuerte y lo consiguió: el resultado fueron 30 cm de cabello rubio ceniza que se donará a uno de los 335 pacientes que sigue la asociación, comprendidos entre los 2 y los 20 años.
“Él decidió hacer un poco de búsqueda por su cuenta y echar una mano, y lo consiguió”, explica su madre Deeanna Thomas al ‘Florida Today’. “Sus amigos lo insultaron y lo trataron como si fuera afeminado, los padres incluso le ofrecieron dinero a cambio de que se cortara el pelo. Pero él nunca desistió, pues estaba decidido a conseguir su objetivo. Nunca dejó de explicarle a los demás porqué había tomado esa decisión”.