Se originó en los años 20 y Grace Kelly lo popularizó en los 50. Pero no fue hasta la aparición en 2012 de una espectacular Penélope Cruz en los Óscars que el falso bob se impuso como uno de los peinados estrella entre las celebrities de medio mundo.
Jugar al despiste luciendo una melena corta sin echar mano de la tijera lo catapultó a las listas de los looks de éxito. Y lo sigue siendo. Este 2015, el conocido como ‘faux bob’ vuelve pisando fuerte como una de las tendencias más demandadas en los salones de peluquería para todo tipo de eventos.
El estilista francés Louis Philippe, junto con Termix, nos invita a su salón situado en el corazón de la Ciudad Condal para presentarnos las claves de este peinado al alcance de todo el mundo.
“Como todo peinado, lo más importante es trabajar adecuadamente la base para asegurar su durabilidad. En el caso del ‘faux bob’, con influencia retro, trabajamos toda la melena con plancha para conseguir unas ondas muy marcadas”, explica Louis Philippe. “Para ello, es necesario utilizar una plancha que nos de la opción de adaptar la temperatura al tipo de cabello para no dañarlo y además conseguir el resultado perfecto. En el salón utilizamos la plancha Termix 230º Black, que es una de las más completas y avanzadas del mercado, pues nos permite trabajar todo tipo de tratamientos como la queratina y personalizar el servicio de peinado para cada clienta”, añade.
A partir de ahí, la técnica es muy sencilla. “Lo importante es elegir la altura correcta para definir el recogido y conseguir no tensarlo mucho para mantener el volumen. Hay quienes también cepillan previamente el cabello para abrir más la onda. Para ello se puede utilizar un cepillo con fibras naturales de jabalí, como el de Termix, que permite conseguir más volumen, muy de moda también este año con las melenas o midi con influencia de los años 70”, concluye Louis Philippe.
SOBRE LOUIS PHILIPPE
El estilista francés abre su primer salón de peluquería y maquillaje profesional en Barcelona, diseñando un espacio creativo en el que los protagonistas indiscutibles son el profundo respeto por el cabello y la atención personalizada a los clientes. La filosofía del salón respira la intensa trayectoria de Louis Philippe –con formación en Pivot Point International Academy y Jacques Dessanges París– y su experiencia de más de una década en el sector de la imagen, tanto a nivel nacional como internacional, en desfiles, publicidad, televisión, etc. además de impartiendo clases en diversas cadenas de peluquería de prestigio.